La mitad del cuerpo de Juan son sus ojos,
enormes, negros y abiertos
de tal manera que parecen mirarlo todo,
absorbiendo así miles y miles de novedades.
Un cuarto del cuerpo de Juan es su cabeza,
donde va depositando ese mundo de asombros
que confunde la baba con la naranja con la teta
y la teta con la vida y la tierra.
Un quinto del cuerpo de Juan son sus rodillas,
curtidas por las baldosas, pastos y alfombras
que se deshacen en su camino.
Un décimo del cuerpo de Juan es su boca,
que propone un nuevo idioma
donde los perros y los gatos también participan
y son reyes ocupando palacios y planetas de no más de un metro veinte.
Todo el cuerpo de Juan empieza por sus manos,
esas llaves hacía el universo de plastilina
que se sostiene por un minuto
y se estrella contra el piso después.
Poeta, periodista y agitador cultural. Forma parte de la revista Pipí Cucú, del programa de radio El Hombre de la Bolsa, de la editorial )el asunto(, del CC Pachamama, de la FLIa y del Dúo Alpargata (proyecto de charango y poesía compartido con Santi Ortiz); en conclusión, duerme poco y sueña mucho. En el 2005 publicó Ceci no es una pipa (poemas y cuentos, ilustrado por Sebi Nóbrega), y en el 2007, Duendes del Conurbano (con dibujos de Freddy Fernández). Ahora, en este mismo instante, está preparando el libro de cuentos Por cuatro días locos para Cóctel Molotov.
1 comentario:
Alejandro Raymond es uno de los mejores poetas vivos que conozco. Pero no solo representa eso para mi. Además, conociendonos muy poco, es para mi un amigo y un hermano latinoamericano.
Mitka
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